El pasado fin de semana, el Complejo Cinco’s en El Tabo se transformó en el epicentro de la cultura oriental con la celebración de la segunda edición de la Expo Kai: La gira de los Mugiwara. Este evento, que ya ha comenzado a ganarse un lugar en el corazón de los fanáticos del anime, reunió a miles de asistentes, desde niños hasta adultos, para disfrutar de una jornada llena de color, música, comida y mucho cosplay.
Desde tempranas horas, los asistentes se sumergieron en el ambiente festivo que rodeaba cada rincón del evento. Los cosplays sorprendieron a los presentes, con elaborados disfraces que recreaban a sus personajes favoritos de series icónicas como One Piece, Naruto, Dragon Ball y muchos más. La creatividad no tuvo límites, y los participantes no solo exhibieron sus trajes, sino que también se tomaron el tiempo de hacer pequeños actos de interpretación, llenando el lugar de energía y risas.
Pero la Expo Kai no fue solo un evento de disfraces. Los stands de comida ofrecieron una amplia variedad de platos típicos de la gastronomía asiática, como ramen, sushi, takoyaki y hasta postres tradicionales, lo que permitió que todos los asistentes pudieran disfrutar de los sabores orientales mientras exploraban los productos de la feria de emprendedores.
El evento también se destacó por su apoyo a los creadores locales, brindando un espacio para que pequeños emprendedores exhibieran sus productos relacionados con la cultura pop asiática: desde figuras de colección hasta ropa, accesorios y arte personalizado.
El cierre perfecto para esta jornada llena de magia fue el esperado tributo de la banda Como Monos, quienes se encargaron de ponerle ritmo a la tarde con su enérgico show, interpretando las canciones más emblemáticas de 31 Minutos, el famoso programa chileno que conquistó a toda una generación.
Con una mezcla perfecta de entretenimiento, cultura y comunidad, la Expo Kai se consolidó como uno de los eventos más esperados en la región, dejando en claro que la pasión por el anime y la cultura japonesa sigue creciendo en Chile. ¿Qué nos deparará la próxima edición? Solo el tiempo lo dirá, pero sin duda, la magia de este evento continuará iluminando El Tabo por muchos años más.